La pandemia lo cambió todo para muchos de nosotros, especialmente en el ámbito laboral. Muchos de los trabajos que antes realizábamos desde una oficina, se hacen ahora en home office o trabajo remoto, es decir, desde casa. El home office tiene muchas ventajas, sin duda, pero quizás uno de sus inconvenientes más destacados sea el relacionado con el tiempo.
Si tienes problemas de tiempo y productividad al trabajar desde casa, sigue leyendo este artículo de Kyocera. SIgue leyendo este artículo para aprender cómo gestionar el tiempo en home office o trabajo remoto.
El home office tiene defensores y detractores. Durante la pandemia muchas empresas se vieron obligadas a impulsarlo por la evidente razón de proteger la salud de sus trabajadores. De este modo, aquellos que podían realizar sus tareas sin más herramientas que un ordenador y conexión a Internet pudieron seguir siendo productivos.
Ahora que la normalidad ha regresado, algunas empresas mantienen la posibilidad del trabajo remoto, mientras que otras han preferido que sus trabajadores vuelvan al modelo presencial.
Pero ¿qué diferencias hay entre el home office y el trabajo desde la oficina? Estas son las más importantes:
El home office permite al trabajador ahorrarse el tiempo de desplazamiento al trabajo. Esta ventaja se aprecia sobre todo en grandes ciudades, donde muchos emplean más de dos horas diarias solo a trasladarse de su casa a su lugar de trabajo.
Gracias al home office, la empresa puede ahorrar costos relacionados con las oficinas, como la factura de la luz, materiales o incluso alquiler del lugar de trabajo. No obstante, en caso de optar por el trabajo remoto, sí suele ser necesario facilitar el material de trabajo o bien compensar económicamente parte del costo de luz e Internet.
La flexibilidad a la hora de establecer el horario es mayor con el home office. Puede valorarse como un punto positivo, puesto que seguramente el trabajador se sienta más motivado al gestionarse su propio tiempo. No obstante, puede ser también negativo por la falta de control sobre las horas productivas.
Muchos creen que la supervisión de las tareas es más sencilla cuando se trabaja de forma presencial. Puede haber algo de verdad en ello, si bien depende de las herramientas que se utilicen. Trabajando en remoto, se puede estar en contacto habitualmente con los trabajadores y supervisar de cerca su trabajo con las herramientas adecuadas.
Las diferencias mencionadas son las más importantes entre trabajar en remoto o de forma presencial, aunque existe también el tema de la productividad. Este es sin duda uno de los puntos más importantes cuando se decide entre ir a oficina o el home office.
La realidad es que la productividad depende principalmente del perfil del trabajador, y de cómo gestiona el tiempo en home office o trabajo remoto. Algunos se distraen fácilmente mientras que otros son asombrosamente productivos desde sus casas.
La pregunta es: ¿cómo se consigue gestionar el tiempo trabajando en casa? Con tres sencillos pasos: evitar distracciones, gestionar bien tu tiempo y ayudarte de la tecnología.
Cuando trabajas en remoto, ya sea por decisión propia o porque tu empresa te lo permite, puede parecer que todo son ventajas. Adiós a los interminables atascos u horas pasadas en un transporte público, y hola al horario flexible y la autogestión. Pero esto tiene sus trampas.
Para evitar acabar siendo menos productivo en casa que en la oficina, desde Kyocera te recomendamos evitar los siguientes errores:
Para que tu tiempo sea totalmente productivo, lo mejor es hacer un horario de trabajo y procurar respetarlo totalmente. Este, puede ser flexible dependiendo de tus tareas, pues algunas veces requieren más tiempo que otras. Si es necesario, puedes ir actualizando tu horario durante el día.
Aquí tienes algunos consejos de Kyocera para hacer un horario y gestionar tu tiempo en trabajo remoto:
Puedes hacerlo diaria, semanal o mensualmente, incluso cada 15 días si te resulta más cómodo.
No se trata de cronometrarte al milímetro, sino de establecer un tiempo medio aproximado de lo que tardas en hacer cada cosa. Así, sabrás cómo distribuir las tareas.
Dentro de tus organizaciones diaria, semanal, etc., es importante priorizar las tareas que sean más importantes. El objetivo principal es cumplir con tus objetivos sin sobrecargarte de trabajo.
Una vez claro cuáles son tus tareas, cuánto tardas en hacer cada una y cuáles son prioritarias, establece un horario que te permita llevarlas todas a cabo, con un pequeño margen por si surgen imprevistos.
El concepto de productividad es clave en el mundo del trabajo. Gestionar tu tiempo en home office es muy importante para alcanzar los objetivos de productividad. Pero esto no es posible si caes en las distracciones que supone estar en casa. Estas son las que debes evitar:
Hay determinados trucos y herramientas que puedes utilizar para gestionar mejor tu tiempo cuando trabajes en remoto:
No se trata sencillamente de llevar una agenda para las cosas más importantes, sino de apuntar en ella todas las tareas que tengas programadas para ese día. Puedes ir tachando aquellas que hayas concluido, he incluso anotar el tiempo que tienes previsto dedicar a cada una de ellas.
Delegar es muy importante si crees que no llegas a tiempo a todo. A veces, para gestionar bien tu tiempo, es imprescindible no abarcar más de lo que debes. Por ello, considera siempre buscar ayuda con determinadas obligaciones.
Las aplicaciones de gestión del tiempo son una herramienta muy útil para el trabajo, especialmente para el home office. Algunas de las aplicaciones que pueden servirte para gestionar correctamente tu tiempo son Google Calendar, Tick Tick y Timely.
Si haces trabajo de oficina en casa, y necesitas ser muy productivo, es importante tener una impresora de calidad, que imprima y escanee lo más rápido posible. En caso contrario, tendrás que esperar demasiado por algunos documentos que pueden ser vitales para completar tus tareas.
Por eso, en Kyocera te ofrecemos las impresoras y equipos multifuncionales más rápidos e innovadores del mercado que te ayudarán a mejorar tu eficiencia y productividad en el trabajo, estés donde estés.