La flexibilidad y eficiencia de nuestros dispositivos y herramientas de trabajo es parte esencial para llevar nuestras labores con éxito, de forma adecuada y con eficiencia. Por ello, los tomadores de decisiones y dueños de empresas deben optar por dispositivos y equipos cuyo desarrollo dé prioridad a la experiencia del usuario y a la resolución de sus necesidades. Pero, ¿cómo encontrar este tipo de equipos?
Se define como “usabilidad” o “facilidad de uso” a las características que tiene un software o hardware para brindar simpleza y sencillez en una experiencia de uso centrada en el usuario y sus requerimientos. Esto involucra un trabajo de diseño, programación, comunicación y marketing con el propósito de mejorar la interacción entre usuarios y productos.
La usabilidad contempla, de forma básica, los siguientes aspectos:
Procurar una buena experiencia de usuario siempre traerá beneficios.
Jakob Nielsen, investigador danés en interacción humano-computadora, propuso 10 principios de usabilidad web que todos los sitios deben seguir para ser considerados amigables y útiles para el usuario.
Aunque se trata de aspectos relacionados con piezas de software, podemos extrapolar algunos a dispositivos de uso diario, como las impresoras y que, por ende, podrán ayudar en la adquisición de equipos adecuados.
Este punto refiere a que el usuario deberá poder intuir el manejo de un dispositivo con tan sólo observarlo. Para ello, se requiere que los botones y áreas de trabajo estén debidamente señaladas y visibles, así como contar con ayudas para indicar su funcionamiento, como el uso de códigos de colores.
Un aspecto que resulta sumamente importante: la usabilidad debe sustentarse en los requerimientos de los distintos usuarios. Esto implica contar con un equipo con el que sin importar las capacidades motrices, visuales o cognitivas de una persona, todos puedan realizar sus tareas con éxito y sin complicaciones.
La experiencia de uso de un dispositivo deberá ser consistente. Esto significa contar con aspectos básicos como botones, tipografías e interfaces de usuario que mantengan una relación entre sí para un uso mucho más eficiente e intuitivo.
Un buen dispositivo deberá contemplar, desde su diseño, todos aquellos errores cometidos por los usuarios durante las pruebas de usabilidad. Por más "perfecto" que sea un dispositivo siempre debe tener en cuenta los errores que las personas puedan cometer y, por ello, es fundamental que se disminuyan estos al mínimo y que su resolución, en caso de presentarse, sea rápida.
Los dispositivos con una buena usabilidad le darán prioridad al reconocimiento de acciones y funciones en su diseño antes que depender de la memorización por parte del usuario. Los aspectos visuales coherentes y familiares le permitirán a las personas utilizar el hardware sin complicaciones, sin importar si es su primer encuentro con éste o si tiene años de experiencia en su manejo.
Aunque podría parecer un detalle superfluo, el diseño de los dispositivos influye mucho en la experiencia de los usuarios. Si este resulta agradable y fácil de identificar, los usuarios se sentirán bien al utilizarlo.
Los dispositivos deben contar siempre guías e instrucciones claras y precisas sobre su uso. Independientemente de la necesidad de una experiencia sencilla, intuitiva y libre de dificultades, resulta indispensable contar con ayuda adicional para resolver problemas o simplemente conocer con mayor detalle el uso adecuado.
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Ahora que estás familiarizado con algunos de los principios de usabilidad, a continuación te compartimos algunas recomendaciones que puedes considerar para poner tus necesidades como usuario al centro de tu búsqueda.
Previo a buscar un equipo –sin importar su naturaleza– es importante que realices una ponderación profunda sobre su propósito dentro de tu empresa.
De igual manera piensa en los perfiles de los diferentes usuarios que tendrá; es decir, piensa si sólo será usado por miembros experimentados de un equipo o si será un dispositivo al que todos tendrán acceso. Esto te ayudará a definir el grado de amigabilidad que requiere tu espacio de trabajo.
Esto consiste en analizar las capacidades –y discapacidades– de las personas que usarán el dispositivo. Tomar conciencia de las limitaciones que nuestros compañeros tienen nos llevará a tomar la mejor decisión al seleccionar un dispositivo que las atienda y ofrezca una experiencia libre de complicaciones para todos por igual.
Siempre es importante escuchar las opiniones y propuestas de aquellas personas que interactúan de primera mano con los equipos. Colocar al usuario en el centro de la experiencia comienza con escuchar cuáles son sus necesidades y peticiones sobre aquello que podría facilitar y hacer más eficiente su trabajo.
Procurar una buena experiencia de usuario siempre traerá beneficios, conoce algunos de ellos:
En Kyocera buscamos contribuir a nuestros clientes y sus necesidades diversas por medio de dispositivos y servicios de documentos fáciles de usar. Por ello, diseñamos y creamos productos a través de procesos centrados en los usuarios.