A pesar de los múltiples beneficios que puede traer para una empresa el tener una presencia digital, existen una serie de amenazas que ponen en riesgo su integridad y bienestar, conocidas como ciberataques. Esto obliga a que los negocios implementen diversas acciones para protegerse de cualquier riesgo que pueda traer el entorno cibernético.
En este artículo nos enfocaremos en todo lo que puedes hacer para blindar tu negocio de ciberataques. Daremos un repaso a qué son, los tipos de existen y en qué consisten, por qué es importante protegerse de ellos, así como algunas recomendaciones que puedes poner en marcha para proteger a tu empresa.
La presencia digital de una entidad, ya sea un individuo o una organización, supone que pueda ser blanco de intentos maliciosos por vulnerar su seguridad. Propiamente conocidos como “ciberataques”, se tratan de actos delictivos ejecutados con herramientas informáticas que tienen como fin dañar, espiar, robar o inutilizar una estructura digital.
Aunque como mencionamos, tanto personas individuales como empresas están abiertas a este tipo de ataques, por su presencia y la dimensión de sus operaciones, los negocios tienden a ser los objetivos más atractivos de actos de esta naturaleza.
Un ciberataque puede resultar en consecuencias severas para las víctimas. Algunos de los riesgos más comunes que ello supone son:
Debido a que los riesgos cibernéticos pueden provenir de distintas fuentes, realizar una categorización de los mismos resulta útil en la planeación de esfuerzos para prevenirlos. Existen cuatro grandes tipos en los cuales podemos clasificarlos:
El aumento exponencial de empresas que han trasladado sus operaciones a un ambiente digital ha provocado un incremento paralelo en los ciberataques. El FBI reportó que durante el año 2020 su División Cibernética recibió hasta 4,000 denuncias al día por delitos de esta naturaleza, lo que representa un incremento de 400% respecto a periodos anteriores.
Al ahondar en la importancia de defenderse de los ataques cibernéticos está el hecho de que vulneran a las empresas en múltiples frentes. De acuerdo con informes del gobierno de Estados Unidos, el robo a negocios como resultado de ciberataques representa a las empresas una pérdida por encima de los 160.000 millones de dólares.
Además del impacto económico (provocado por actos como el robo de información financiera, pérdida de contratos o robo de dinero), los ciberataques pueden dañar las relaciones de confianza que se mantienen con clientes, proveedores y socios estratégicos. Lo anterior, a su vez, puede significar una disminución en las ventas y ganancias.
Particularmente para las empresas, ser víctima de un ciberataque también puede traer consecuencias legales en perjuicio del mismo negocio. El establecimiento de leyes de protección de datos por parte de distintos países ha llevado a las empresas a invertir más en el buen manejo, uso y resguardo de la información. Si dichos datos son el objeto de un cibercrimen, la empresa a la cual pertenezcan puede ser penalizada con multas económicas u otras sanciones.
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Ante las serias consecuencias que los ciberataques pueden traer, las empresas deben tomar una serie de medidas esenciales para protegerse de cualquier amenaza, sin importar si son internas o externas.
Una de las medidas de prevención ante cualquier riesgo es conocer a profundidad cuáles son dichas amenazas. Los elementos a lo largo del organigrama deberán contar con información clara y útil sobre los peligros que existen en el mundo digital; también deberán estar actualizados respecto a las formas de seguridad en la red.
En continuidad con las disposiciones preventivas, se debe realizar una actualización asidua del hardware y software operativo. Adicionalmente, se recomienda respaldar datos e información de alta importancia para contar con ellos en caso de pérdida.
Por otro lado, una correcta estrategia contra ciberataques necesitará del control de quién, cómo y la forma en que se puede acceder a la información. Además de una lista del personal que usa el equipo de la empresa, se recomienda la autenticación de usuarios mediante la utilización de contraseñas seguras, así como el cambio constante de las mismas.
Otro aspecto importante para proteger a tu negocio de ciberataques es realizar una consulta previa sobre las medidas y protocolos que actualmente se encuentran en operación. Es recomendable consultar a profesionales en la materia para conocer con mayor detalle las áreas de oportunidad de cada plan de seguridad digital.
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